Al momento de elegir un notebook gamer pueden surgir muchas dudas, principalmente, porque mucha gente no conoce la diferencia entre un equipo especialmente diseñado para jugar y un notebook tradicional.
¿Estás en búsqueda de un notebook para pasar horas jugando tus títulos favoritos? Entonces revisa esta guía, en la que encontrarás las especificaciones técnicas en las que debes fijarte al momento de comprar uno.
La principal diferencia entre un notebook gamer y uno tradicional es que el primero dispone de componentes de alto rendimiento y el segundo no. Una laptop tradicional suele utilizarse para el trabajo diario, ocio y actividades que consumen pocos recursos.
Sin embargo, una laptop gamer te ofrece las especificaciones técnicas óptimas para obtener un buen desempeño, especialmente considerando que los videojuegos cada vez exigen mayor potencia de procesamiento y calidad gráfica.
Utiliza un notebook enfocado al gaming para vivir la mejor experiencia de juego a través de diseños modernos y componentes de alta potencia.
Ya sabes que la GPU y CPU no son actualizables en un portátil, sin embargo, la RAM, SSD y HDD sí lo son.
Inicialmente, puedes adquirir un equipo con 8 GB de RAM y, luego, expandir la memoria a 12, 16 o 24 GB, según las limitaciones del equipo y cómo acomodes las ranuras. Si inicialmente tienes dos ranuras y una memoria RAM de 8 GB, puedes expandir a 16 GB de RAM agregando otra memoria de 8 GB en la ranura vacía.
Lo mismo sucede con el SSD, puedes cambiar de 128 GB a 256 GB o expandir el HDD de 1 TB a 2 TB. Incluso puedes utilizar un disco duro externo si lo consideras necesario.
Un notebook gamer no destaca por tener una gran autonomía. Son dispositivos que utilizan componentes de alta exigencia, y que al momento de jugar a máxima calidad y rendimiento, la batería puede durar 1 hora.
De igual manera, lo ideal es que lo mantengas enchufado para una mejor experiencia.
Existen accesorios enfocados a entregar una mejor experiencia de juego. Los principales a tener en cuenta son